
Los monitores con resolución 4K UHD son cada vez más demandados por los usuarios. En un televisor no existe mucho contenido para disfrutar de sus ocho millones de pixeles de resolución pero en un ordenador la cosa cambia.
Durante unos días he podido probar el monitor Philips Brillance 288P6, una pantalla con resolución 4K UHD que busca ser una alternativa atractiva y viable para muchos usuarios. Si lo conseguirá o no es algo que veremos a continuación.
Características
Philips 288P6 | Especificaciones |
---|---|
Panel | TFT-LCD tipo TN |
Iluminación | W-LED (sistema de les blancos) |
Resolución | 3840x2160 píxeles |
Tiempo de respuesta | 5ms (con smart response baja hasta 1ms) |
Contraste | 1.000:1 |
Brillo | 300 cd/m2 |
Ángulo de visión | 170º |
Conectividad | 2 x USB 2.0, 2 x USB 3.0 + faster charge, VGA, DVI-Dual Link, Display Port 1.2, MHL-HDMI, entrada audio, salida auricular |
Altavoces | 2 x 3w (colocados en la zona inferior) |
Extras | Modos de imagen PiP y PbP, diferentes ajustes de color, brillo, etc |
El monitor Philips Brillance 288P6 es una pantalla con unas características técnicas que a priori, junto a su precio (entorno a los 480 y 550 euros), lo sitúan como una opción de compra interesante. Sobre todo si tenemos en cuenta que hay pantallas con resolución QHD y 27" que se sitúan en precios similares. Aunque luego veremos qué diferencias existen entre ambas.
Análisis en vídeo
Diseño
A pesar de ello, será cuestión de gustos el que te convenza más o menos el trabajo realizado por el departamento de ingenieros de Philips. A mi personalmente no me parece atractivo físicamente y esa línea plateada de la parte inferior no me convence.
Fabricada en plástico, como la mayoría de pantallas del mercado, la sensación de acabado es buena y para nada se siente crujir cuando giramos o cambiamos de posición. Así que no será atractivo físicamente pero está bien construido. Por lo que podemos aventurarnos a decir que será un producto duradero.
Cuando lo giramos podemos ver las diferentes conexiones. En el lateral izquierdo (si miramos desde atrás) encontramos un HUB USB con 2 puertos USB 2.0 y otros dos USB 3.0 -uno de ellos habilitado para la función fast charged- más el conector que va hasta nuestro ordenador.
La entrada es para hacer uso de los dos altavoces integrados. Estos son meramente presenciales, con 3W de potencia no aportan un gran sonido pero siempre resultan útil para tener un poco de sonido de referencia.
Rendimiento, ojo a los requisitos en tu PC
En mi caso he conectado un Mac Pro con 6 cores y doble GPU AMD FirePro D500. Este equipo ofrece tanto la opción de conectar a través de HDMI como Display Port (Thunderbolt). Así que por potencia no iba a quedarme corto aunque sí he encontrado algunas limitaciones.
En primer lugar a través de la conexión HDMI, tanto en OS X como Windows, el refresco de pantalla queda limitado a 30 Hz. Sólo haciendo uso del conector Display Port 1.2 se llega a los 60Hz.
Con imágenes estáticas, por ejemplo aplicaciones de diseño, la cosa cambia y la imagen se ve muy bien aunque con algunos ajustes extras. Es, seguramente, en esas situaciones en las que requerimos de un gran espacio de escritorio donde más se aprovecha un monitor con tal resolución. Para otros usos como juegos o la reproducción de vídeo opciones 1080p o 1440p me parecen que siguen siendo más interesantes.
Calidad de imagen
La primera vez que enciendes el monitor de Philips y ves la imagen de tu escritorio quedas sorprendido, porque tanta resolución te dispara a los ojos una imagen nítida y detallada. Pero en el momento que puedes comparar cómo se ve un panel IPS y este de tipo TN aprecias que los colores no son tan correctos. No es un monitor para usar en edición fotográfica o vídeo con corrección de color.
La representación de color de fábrica no es la más adecuada. Probando los diferentes perfiles ya configurados (modo cine, juegos, oficina,…) tampoco obtenemos unos resultados satisfactorios así que la única solución es jugar con los ajustes manuales.
Después de un rato y comprobar que en temas de brillo y contraste tampoco es de los TOP podemos conseguir una imagen mejorada pero no esperar maravillas. Frente a un panel IPS la representación de color no es tan satisfactoria y la intensidad de los negros no es mala pero no la mejor.
La ventaja es que en el hogar podemos ajustar las condiciones lumínicas de la habitación en la que lo usemos y eso nos permite subsanar algunos contratiempos.
Por último, el tiempo de respuesta de 5ms o 1ms si hacemos uso del modo Smart Response no están nada mal pero ojo, nuevamente, si usamos la conexión Display Port y podemos usar la pantalla a 60Hz.
Conclusiones
Con un equipo como un Mac Pro y después de haber podido analizar el iMac con pantalla Retina 5K he de reconocer que pantallas con menor resolución ya no me atraen tanto. Quiero un monitor con resolución 4K UHD como mínimo pero tal vez aún sea pronto.
La potencia que has de pedirle al equipo es mucha para obtener una buena experiencia y la adaptación de las interfaces de las aplicaciones recién comienza. Por tanto nos quedamos con la sensación de estar a medias.
Por ello, aunque quiero una pantalla con tal resolución para mi equipo creo que dos monitores QHD puede ser más interesante ahora mismo si lo que necesitamos es mayor espacio de escritorio.
De todos modos del monitor de Philips puedo decir que me ha gustado pero son varios los condicionantes que hacen que mis expectativas actuales no se vean cumplidas. Si estas buscando un monitor 4K UHD a buen precio no estaría nada mal considerarlo. Si aún piensas que no es para ti o tu equipo no es capaz de gestionar tal resolución, a pesar de su precio, mejor mirar otras opciones.
El equipo ha sido cedido para la prueba por parte de Philips. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas