Jose Antonio Carmona
Editor SeniorA la hora de reformar y hacer obra en una vivienda, el apartado eléctrico es fundamental. No se trata solo de corregir los fallos de una instalación antigua, sino también de pensar en el futuro. Y en este sentido, hay un elemento clave que no conviene pasar por alto.
Cuando vayas a mejorar o actualizar la instalación eléctrica de casa, hay algo que no puede faltar. En mi caso lo acabo de aprender hace poco por la reforma de un vecino y no, no me refiero al cable de tierra, que también (me he enterado que en mi bloque solo mi piso lo tiene): es básico conocer para qué sirve cada cable y sobre todo que la instalación tenga uno en concreto, el neutro. Y es de vital importancia si estás pensando en montar un hogar conectado. Aunque a tu electricista probablemente no se le pase por alto, nunca está de más recordárselo.
Qué es y por qué es tan importante un cable neutro
Imagen | Endesa
Hablo de la importancia de contar con un cable neutro en la instalación eléctrica de la vivienda. Por si no tienes claro en qué consiste, en muchas webs especializadas en electricidad y hasta empresas como Endesa, explican la función del cable neutro como un elemento básico para el correcto funcionamiento de la instalación eléctrica del hogar.
Hay que tener en cuenta que edificaciones antiguas, esto no ocurría, pero ahora y en viviendas modernas muchos interruptores inteligentes necesitan el neutro para tener alimentación continua, algo que explican de forma técnica en este enlace.
Como detallan, en un circuito eléctrico, la corriente solo puede circular si existen dos puntos: fase y neutro. La fase es el cable por el que llega la corriente, mientras que el neutro completa el circuito y devuelve esa corriente a la fuente. Sin neutro, la carga no puede funcionar porque el circuito queda incompleto.
Hoy en día, llevar el cable neutro hasta los interruptores es cada vez más importante. Antes no se hacía porque los interruptores tradicionales solo cortaban la fase y no lo necesitaban. Sin embargo, muchos dispositivos actuales, como los interruptores inteligentes o los sistemas de domótica, sí necesitan neutro para funcionar correctamente. Si no está presente, directamente no se pueden instalar o dan problemas.
Pensando a largo plazo. Dejar el neutro preparado es una forma de adelantarse a acontecimientos futuros: quizás ahora no lo vayas a necesitar, pero si en un momento determinado quieres reemplazar un interruptor básico por uno conectado, si no tienes neutro en la caja te tocará hacer obra de nuevo (levantar paredes, hacer rozas, pintar...) con el gasto y las molestias que eso supone.
El tamaño de la caja importa
Foto de Pavel Danilyuk
Además de la importancia de realizar una preinstalación o instalación para el cable neutro, también es conveniente fijarse en otro detalle más en esta ocasión relativo a las cajas de los mecanismos.
Aunque el electricista también sabrá lo que tiene que hacer cuando se trata de instalar las cajas de los mecanismos, no está demás, fijarse en que estas sean profundas, de unos 50 o 60 milímetros: en este enlace explican que tipos de cajas hay y que medidas suelen tener. Y este tamaño tiene una explicación relacionada con lo anterior: son cajas que tienen más espacio para los cables y permiten trabajar con mayor comodidad. Así se evitan cables doblados, apretados o mal colocados, algo que puede acabar provocando fallos o problemas de seguridad.
Las cajas profundas son especialmente necesarias cuando se instalan mecanismos electrónicos, como interruptores inteligentes o reguladores de luz, que ocupan más espacio que los interruptores de toda la vida. Con una caja poco profunda, colocarlos correctamente se vuelve complicado o incluso imposible.
Qué cables te puedes encontrar en una instalación
Imagen | Iluminashop
La forma más útil de diferenciar qué tipo de cable tenemos entre manos (la web de Iluminashop lo explica de forma muy didáctica) y para qué sirve cada uno es atendiendo a su color. Esta es una lista de los colores más comunes:
- Cable verde y amarillo: se utiliza para la toma de tierra, encargada de la seguridad de la instalación.
- Cable azul: identifica el neutro. En instalaciones antiguas, anteriores a 1970, solía emplearse el color rojo para esta función.
- Cable marrón: corresponde a la fase, aunque en algunos equipos también puede aparecer en negro o gris.
- Cable negro: suele ser también un conductor de fase y, en determinadas instalaciones, puede encontrarse en color blanco. Es habitual en muchas viviendas.
- Cable blanco: puede emplearse como neutro. En algunos casos también se usa en conexiones de tierra, pero únicamente para devolver la energía al transformador.
- Cables de colores con franjas: se utilizan como neutros y sirven para distinguir a qué conductor de fase corresponde cada uno.
- Cables de colores lisos: salvo los que llevan rayas, se emplean como cables de corriente o carga, siendo el rojo uno de los más habituales.
Controlando estos aspectos básicos junto a otros como la potencia contratada o la presencia de un cable de tierra, podemos tener una instalación eléctrica adecuada a un hogar para presente y futuro cercano.
En Xataka SmartHome | Así usan los técnicos los colores de los cables Ethernet: y yo durante años pensando que eran solo cuestión de estética
Ver 1 comentarios