A la hora de gestionar el control domótico de la casa y de todos los elementos que integran el hogar conectado, son dos grandes plataformas las que tienen el control de buena parte de los dispositivos. Mientras esperamos que Matter cumpla con sus promesas, son Alexa y Google Home los grandes protagonistas (mientras Siri mira desde la barrera).
En casa tengo altavoces y dispositivos compatibles con las tres plataformas, pero salvo un par de excepciones, son Alexa y Google Home, los sistemas que más uso cuando tengo que interactuar con ellos para controlar el hogar conectado. Y tras varios años de uso, este es el veredicto que me hace cantarme por Google Home, en vez de por la propuesta de Amazon.
Google Home y sus razones de peso
Opiniones hay para todos los gustos y por ejemplo, mi compañera Eva opina justo lo contrario. Pero se trata de algo que depende del uso que cada usuario le de y de cómo tenga configurado su hogar... y no se puede negar que en el fondo, también hay un poco de preferencia por una marca.
En lo referente a funciones, ambas plataformas ofrecen unas características muy parecidas, pero luego hay pequeños detalles que hacen que se diferencian de forma notable. Y estas son los puntos que hacen que prefiere usar Google Home a Alexa.
En la casa tengo distintos altavoces, la mayor parte de ellos de Google y otros tantos de Apple (los uso sobre todo para música por la calidad de audio y lo fácil que se usan con el ecosistema Apple). De Amazon tengo sólo dos altavoces que me sirven para controlar buena parte del hogar conectado. Pero aún así, me gusta más Google Home.
Es cierto que Alexa suele tener mejor ratio de respuestas cuando se trata de hacer una pregunta, pero a la hora de configurar y usar el hogar conectado, encuentro que Google Home ofrece más facilidades. Es una opinión personal que baso en el uso que le doy, por lo que en otro caso puede ser diferente. Pero esta afirmación tiene unas causas.
En lo que han compatibilidad me refiere no hay grandes diferencias y las dos plataformas ofrecen una gran compatibilidad con todo tipo de dispositivos. Es más, cuando compro una bombilla, un enchufe u otro aparato compatible con Alexa, casi siempre lo es también con Google Home (y al revés ocurre lo mismo).
Tanto Alexa como Google Home son compatible con una cantidad de servicios y es verdad que quizás Alexa es un poco más abierta gracias a las skills que pueden desarrollar terceros. No obstante, resulta desde mi punto de vista más práctico que la compatibilidad con los distintos aparatos venga ya integrada y no tenga que estar buscando utilidades que algunas veces no se encuentran fácimente.
En mi caso, además, al tener un televisor que funciona con Google TV y otro con Android TV, el ecosistema Google Home me resulta aún más práctico ya que puedo usar el teléfono como mando distancia incluso para escribir en la tele. Y eso cuando se trata de teclear en gran cantidad, es más que práctico.
Tanto Google Home como Alexa permiten el uso con teléfonos que funcionan con Android y con el iPhone, pero Google Home me parece más eficiente en Android (lógico por otra parte).
Además, una de las cosas que más me gusta y que ha cambiado en los últimos meses, es la interfaz que usan ambas plataformas. Con el cambio de diseño de Google Home y sus tarjetas, todo me parece más agradable de usar que su homónima de Alexa. Personalmente me parece que todo está más ordenado y más accesible, sin tener que andar buscando y navegando por distintos menús.
Es cierto que donde quizás Google sale perdiendo, es en la variedad de dispositivos con el sello Nest que podemos encontrar. Encuentro que Amazon y su ecosistema de productos propios es más variado y ofrece soluciones para todos los gustos y bolsillos.
Luego está el simple hecho que hace que usar el asistente sea más fácil en el caso de Google que con Alexa. Para usarlo en un teléfono con Android, solo tengo que dar la orden, mientras que en el caso de Alexa tengo que entrar en la aplicación y realizar la pregunta oportuna.
En Xataka SmartHome | Tengo toda la casa llena de dispositivos conectados con Alexa y empiezo a cansarme de hablar a una máquina