En España existen dos mercados a la hora de contratar nuestra tarifa de gas: el libre y el regulado, este último también conocido como Tarifa de Último Recurso o TUR. Ambos ofrecen diferentes ventajas e inconvenientes y hasta hace algo más de dos años precios competitivos que nos permitían elegir entre múltiples ofertas y compañías.
Sin embargo, el invierno de 2022 todo cambió y la situación de crisis energética hizo que las diferencias en ambas tarifas se fuera agrandando rápidamente. Tanto que contratar en uno u otro mercado podía suponer multiplicar por cuatro la factura a final de mes. De hecho, en 2023 la tarifa más económica fue la TUR, con precios limitados y regulados por el Gobierno que se revisan trimestralmente.
Llegan cambios de precios en la tarifa TUR
Los precios a comienzos de 2024 han seguido estables para la TUR, manteniéndose los límites aplicados al crecimiento de la tarifa que impiden un incremento de coste de la materia prima por encima del 15% y limitando la subida trimestral aproximadamente al 5%.
También se ha mantenido este pasado invierno la existencia de la TUR vecinal, a pesar de que parecía que iba a suprimirse, a la que pueden acogerse las comunidades de propietarios con calefacción central de gas natural. Sin embargo, a partir de abril se presentan cambios en el horizonte de la tarifa regulada.
Imagen: KWON JUNHO
Para empezar, los precios del gas natural han seguido bajando notablemente en los últimos meses. Por ejemplo, en el caso del TTF holandés (índice que marca la cotización del gas en Europa) se derrumbó más de un 70% en 2023 respecto al año 2022 y con la entrada de la primavera la demanda de gas será todavía inferior, por lo que los precios bajarán más.
Esto en principio debería tener consecuencias positivas para los consumidores cuando se actualice la tarifa en la próxima revisión trimestral a partir del día 1 de abril de 2024. De hecho, algunos analistas se aventuran a señalar que la tarifa descenderá un 12% debido al abaratamiento en un 22% de la materia prima que forma parte de la fórmula con la que se fija la TUR.
Sin embargo, aunque este descenso se produzca hay algo que evitará que lo veamos reflejado como tal en las facturas, ya que el primer trimestre del año pondrá fin, de momento, a la subvención estatal del gas natural, por lo que a partir de abril las facturas volverán a tener el IVA normal.
En concreto, el IVA para el gas natural que estaba situado en el 10% durante los primeros tres meses del año pasará a ser del 21% desde el día 1 de abril de 2024, siguiendo así la estela de subidas (o vuelta a la normalidad) de otros impuestos energéticos, como el IVA de la luz que ha vuelto también al 21%, el Impuesto Especial sobre la Electricidad (IEE) con un 3,8% y el Impuesto sobre el Valor de la Producción de la Energía que tendrá un valor del 5,25% hasta junio.
Esos sí, el Ejecutivo decidió en diciembre de 2023 prolongar durante seis meses algunas medidas adicionales, como la prohibición de cortar los suministros de gas, agua y luz a los consumidores vulnerables, los descuentos del bono social eléctrico del 65% para los consumidores vulnerables, del 80% para los consumidores vulnerables severos y del 40% para los hogares trabajadores con bajos ingresos.
Imagen portada | Milada Vigerova
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