Este año 2023, que estamos a punto de finalizar, ha sido el momento elegido por las autoridades en el mercado europeo para prohibir la venta de algunos de los sistemas de iluminación que nos han acompañado en los últimos años, lustros o incluso decenios.
Ha sido la directiva 2011/65/UE del Parlamento Europeo y del Consejo de 2011 la que establece cuales son los sistemas de iluminación que ya no podrán comercializarse y por lo tanto, deben desaparecer de los estantes de tiendas y comercios. Y aunque pueden seguir siendo usadas en casa, a la hora de reemplazarlas, esta son las opciones que ahora vas a encontrar en el mercado.
Los días contados
Este ha sido el año en el que hemos dicho adiós a sistemas de iluminación y bombillas que nos han acompañado buena parte de nuestra vida. Y sí, pueden seguir usándose en casa pero si se funde una bombilla u otro tipo de luminaria, tocará cambiar de tecnología al ir a la tienda.
En concreto, la normativa europea ha prohibido distintos tipos de luminarias, muy comunes aún en gran cantidad de hogares. Estos son los sistemas de iluminación que ya no se podrán comprar en tiendas:
- Lámparas circulares T5. Se trata de un tipo de tubo fluorescente utilizado comúnmente en iluminación en el que la designación "T5" se refiere al diámetro del tubo en octavos de pulgada, por lo que un tubo T5 tiene un diámetro de 5/8 de pulgada. Se utilizan comúnmente en entornos como oficinas, tiendas, cocinas, baños y otras áreas donde se necesita una iluminación eficiente y uniforme.
- Lámparas compactas de casquillo, también conocidas como CFLni, son un tipo de lámpara de bajo consumo de energía que utiliza la tecnología de fluorescencia compacta. La abreviatura "CFL" se refiere a "Compact Fluorescent Lamp" en inglés, mientras que "ni" suele indicar que la lámpara es de inicio instantáneo. Es un tipo que suele tener una vida útil más larga que las lámparas incandescentes, lo que significa que necesitan ser reemplazadas con menos frecuencia
- Tubos fluorescentes de tipo T5 y T8 son los que normalmente se usan en la cocina, pero también los habrás visto en entornos como hospitales, oficinas, tiendas... Como antes, la designación "T5" y "T8" se refiere al diámetro del tubo en octavos de pulgada y para funcionar utilizan tecnología fluorescente para producir luz. En el interior, hay un recubrimiento de fósforo que emite luz cuando es excitado por una descarga eléctrica en el gas dentro del tubo. Está prohibida su venta desde el 25 de agosto de 2023
- Lámparas halógenas con pines G4, GY6.35 y G9, con la venta prohibida desde el 1 de septiembre de 2023. El apodo "Gx" hace referencia al tipo de conexión. Así por ejemplo, el término "G4" indica que la bombilla tiene una base con pines de 4 mm de separación. Los pines son pequeños y están ubicados en la base de la bombilla. Funcionan con corriente de 12 voltios y requieren transformador, lo mismo que las GY6.35, las cuales tienen una base con pines de 6,35 mm de separación. Por su parte, las bombillas G9 tienen una separación entre sus clavijas de 9 mm, funcionan a 230V y se conectan directamente a la red eléctrica.
- Lámparas fluorescentes compactas enchufables. Es otro de los tipos cuya venta estará prohibida a partir del 24 de febrero de 2024. Las lámparas fluorescentes compactas enchufables son un tipo de bombilla compacta que utiliza tecnología fluorescente para producir luz. Estas lámparas compactas están diseñadas para conectarse directamente a un enchufe de pared sin necesidad de utilizar una luminaria especial o una conexión de cableado adicional.
Ya conocemos cuales son los tipos de bombillas y luces que no se podrán usar pero ¿cuáles son los motivos para esta prohibición? Todo se basa en los elementos que componen estos tipos de luminarias. A pesar de sus beneficios en eficiencia energética y duración de vida, estas luces contienen pequeñas cantidades de mercurio, cadmio o plomo, materiales que pueden ser perjudiciales para el medio ambiente si no se desecha adecuadamente, pero también para la salud.
Por lo tanto, es importante reciclar correctamente las lámparas cuando llegue el momento de reemplazarlas (buscando el punto limpio de tu ciudad o dejándolas en la tienda en el punto de reciclado), pero también tener mucho cuidado al manipularlas. Además, se han visto arrinconadas con la llegada y avance de la tecnología LED en las lámparas, que han ganado popularidad como una alternativa eficiente y respetuosa con el medio ambiente a las lámparas fluorescentes compactas.
Qué hago si tengo luces así en casa
Llegados a este punto, la duda puede sobrevenir a los usuarios: ¿qué ocurre si tengo este tipo de luminarias en casa? Pues en principio no pasa nada, puesto que lo que hace la normativa es prohibir la venta de este tipo de sistemas de iluminación, pero no seguir usándolos. De hecho, los comercios que aún tengan stock en las estanterías, podrán venderlos hasta agotar existencias.
El problema en casa viene cuando tengan que ser reemplazadas alguna de estas luces. Ya no podrás ir a la tienda y comprar un nuevo tubo fluorescente, siendo lo más normal que tengas que dar el salto a la tecnología LED (Light Emitting Diode).
Beneficios de la tecnología LED
Imagen | Todoluz en X
Un cambios que se traduce en un menor impacto en el medio ambiente a la hora de reciclarlas, pero también en una menor presencia de sustancias peligrosas (no hay metales pesados como mercurio, cadmio o plomo) y además de ser más eficientes.
Y es que de entrada, las bombillas LED son extremadamente eficientes en términos de energía al convertir una mayor cantidad de energía eléctrica en luz en lugar de calor, lo que resulta en un menor consumo de energía para la misma cantidad de luz producida. Esto se traduce en un ahorro importante en la factura de electricidad al ahorrar hasta el 80% de energía que puede provocar una diferencia de hasta 50 euros si la comparamos con las bombillas tradicionales
Y relacionado con este punto, destacar que a diferencia de algunas tecnologías de iluminación, las bombillas LED se encienden al instante sin necesidad de tiempo de calentamiento. Esto es especialmente útil en entornos donde la luz inmediata es esencial, como en escaleras o portales.
Además, las bombillas LED tienen una vida útil mucho más larga en comparación con las lámparas incandescentes y las lámparas fluorescentes. Pueden durar más de 45.000 horas de media, lo que significa que no tendrán que ser reemplazadas con tanta frecuencia y por lo tanto generar menos residuos.
Otras de las ventajas de las bombillas LED es que son más resistentes a las vibraciones, golpes y cambios de temperatura. Esto las hace ideales para entornos donde las condiciones son más exigentes, como al aire libre o en aplicaciones industriales.
Además, este tipo de soluciones aportan mejoras y por ejemplo, muchas bombillas LED son regulables en potencia de iluminación, lo que significa que puedes ajustar la intensidad de la luz según tus preferencias. Eso por no decir que las bombillas LED están disponibles en una amplia gama de colores y temperaturas de color y te permiten elegir entre tonos cálidos y fríos según el ambiente que desees crear.
Por último, este tipo de luminarias se integran sin problema en el hogar conectado. Además de ser pequeñas y compactas, lo que permite diseños más flexibles y creativos en luminarias, las bombillas LED pueden integrarse en sistemas de iluminación inteligente para por ejemplo controlarlas de forma remota, establecer escenas y programaciones o controlarlas a distancia.
En resumen, la iluminación LED ofrece una combinación de eficiencia energética, durabilidad, versatilidad y opciones de diseño que la hacen muy atractiva en una variedad de aplicaciones y entornos. A medida que la tecnología LED continúa avanzando, es probable que siga desempeñando un papel importante en el futuro de la iluminación.
Alternativas
Ejemplo de bombilla LED
Llegado el momento de hacer el cambio, las opciones son muchas y muy variadas, gracias entre todo a todo lo que ofrece la tecnología LED. Así para reemplazar los clásicos tubos fluorescentes puedes decantarte por usar paneles LED empotrables o paneles LED vistos, disponibles en diferentes tamaños y temperaturas de color.
Otra opción cada vez más común es usar tiras LED que gracias a su modularidad y flexibilidad, se pueden además adaptar a todo tipo de decoraciones y diseños. Y cómo en los casos de bombillas o paneles, hay modelos que se pueden conectar e integrar en el hogar conectado.
Tiras LED
Y si hablamos de bombillas, nos encontramos con modelos básicos y formas clásicas que además pueden cambiar la intensidad de la luz o el color. Y junto a la conectividad WiFi o Bluetooth, hay otros extras como la opción para encontrar bombillas decorativas que se pueden integrar en la decoración al simular por ejemplo a las clásicas bombillas de filamentos.
Bombilla decorativa
Como se puede ver, existen opciones para reemplazar los clásicos sistemas de iluminación que tenemos en casa llegado el momento en el que dejen de funcionar o cuando queremos sustituirlos. No vamos a notar las diferencias en lo que al uso se refiere y en el precio, pues cada vez son más asequibles, pero sí que vamos a notar un menor consumo y su impacto en la factura de la luz.
Imagen portada | Oxana Melis en Unsplash
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