Puede que alguna vez te hayas enfrentado con dudas a los botones de tu lavadora. Ya sea porque esta es nueva, porque sea más o menos compleja o porque es tu primera vez con este electrodoméstico, a llegado el momento de afrontar la primera toma de contacto. Y si se te ha pasado como a mí, seguramente lo habrás hecho sin manual de instrucciones delante. Un motivo por el cual puede que nunca te hayas percatado de una llamativa tapadera que tiene tu lavadora.
Un electrodoméstico que se encarga de dejar limpia la ropa, poniendo orden en nuestra colada. Pero ¿cómo se puede eliminar la suciedad que se acumula en la lavadora? Los modelos más modernos, como vimos ayer, por ejemplo, ya poseen sistemas para desinfectar y limpiar el tambor. Pero además es necesario mantener limpios los distintos compartimentos más allá del tambor y puede que este que ahora te enseñamos ni siquiera lo conozcas.
El filtro es tu amigo... no muerde
Cualquier lavadora tiene un pequeño cajón con distintos depósitos en los que añadir el detergente y el suavizante para la ropa. En estos se suele acumular la sociedad y el moho con el uso continuo, por lo que es interesante mantenerlos limpios cada ciertos periodos de tiempo para eliminar los restos. Pero además, la lavadora tiene un filtro en el que se acumula suciedad que es conveniente limpiar.
Por si no te has dado cuenta, es esa pequeña compuerta que suele estar situada en el frontal de la lavadora, camuflada con el mismo material y color que el resto, en la zona inferior. El objetivo de esta toma es, como explican nuestros compañeros, drenar el agua residual de la lavadora después de que se haya completado un ciclo de lavado.
Imagen de Bosch
Un proceso que es interesante llevar a cabo cada cierto periodo de tiempo que será más o menos mayor en función del uso que hagamos de la lavadora. Lo normal es hacerlo cada tres o cuatro meses.
Dicho esto, para limpiar el filtro de la lavadora lo primero que tenemos que hacer es asegurarnos de que ésta está desenchufada y una vez comprobado, colocar un trapo o paño que sirva de solvente en el suelo justo debajo de donde está la tapa que vamos abrir, porque lo más normal es que suelte agua.
Abrimos la tapa y podremos ver la hélice de la bomba. Podemos comprobar que no hay ningún objeto o resto atascado en ella y que se mueve con normalidad. Puede darse el caso de que algunas veces se cuelen restos. Si encontramos suciedad acumulada, podemos quitarla con cuidado con la ayuda de un cepillo o paño.
Además, tras quitar el tapón del filtro de drenaje, este también hay que limpiarlo, algo que podemos hacer ayudándonos de un cepillo de dientes viejo y agua caliente para facilitar la eliminación de los restos acumulados. Al concluir las tareas de limpieza del desagüe, vuelve a colocar el tapón.
En el caso de tener en casa una lavadora de carga superior puede que el filtro esté en la zona frontal de la lavadora, pero también que se encuentre en su interior. Para encontrarlo abre la tapa y en el tambor busca una especie de compartimento. Sólo tienes que abrirlo para sacar el filtro y así quitar toda la suciedad acumulada. Puedes hacerlo con agua caliente y un cepillo o agua a presión y tras dejar que se seque, colocarlo en su sitio y taparlo de nuevo.
¿Qué pasa si no se limpia el filtro?
Si nunca hemos limpiado el filtro de la lavadora, podemos encontrarnos con un funcionamiento deficiente, de la misma que afecte al resultado de la colada. Podemos encontrarnos en este sentido, con atasco en el desagüe, acumulación de malos olores en el tambor de la lavadora, que la lavadora no coja la suficiente cantidad de agua o incluso que la ropa huela mal después de lavarla.
Imagen interior | Bosch
