Con la llegada del invierno y de la época de lluvias, muchos usuarios comenzamos a tener un pequeño problema relacionado con nuestra ropa, y no, no se trata de realizar el cambio de la manga corta a la manga larga. Una vez que la lavadora ha concluido su colada, y si no se puede o no se quiere usar la secadora, llega el dilema de dónde tender la ropa cuando está lloviendo.
Hacerlo dentro de casa es casi siempre la primera opción, sobre todo en aquellos pisos en los que no hay problemas de espacio. El problema es que tender la ropa dentro de casa, genera humedad en la habitación donde la hemos tendido o incluso malos olores. Para evitar estos problemas, podemos aplicar una serie de trucos a la hora de tender la ropa y secarla sin gastar electricidad.
Mantener la humedad a raya
En época de lluvias, usar un tendedero en el interior de casa es una solución para secar la ropa de forma rápida y efectiva. Pero a cambio, tendremos que lidiar con algunos inconvenientes, como es el caso de una mayor humedad en la habitación o incluso malos olores. Y todo eso contando con que la lavadora, hay efectuado un centrifugado importante y que la ropa no gotee.
A la hora de tender la ropa dentro de casa, en el mercado encontramos muchos tipos de soluciones. Desde los clásicos tendederos plegables que cuentan con extensiones, a modo de alas con las que poder ampliar la superficie en la que colgar la ropa, a los tendederos que se coloca en la pared y que tienen cuerdas extensibles para enlazar de una punta a otra de la habitación.
Dejando un lado donde se tiende la ropa dentro de casa, hay una serie de trucos que se pueden aplicar para evitar la generación de humedades y malos olores.
Habitación ventilada
Imagen | Arina Krasnikova
En este sentido, lo ideal es colocar el tendedero, ya sea de pared, de techo o plegable, en una habitación con ventana, de forma que se puede abrir y airearla siempre que puedas y que no suponga que la casa se convierta en un congelador.
Evitando colocar la ropa en habitaciones sin ventilación (y la puerta no es un elemento válido), evitarás la humedad. Además, es interesante dejar la puerta abierta para que la posible humedad no se concentre dentro de la estancia.
Además, el tendedero debe colocarse cerca de la ventana y si es posible, en una habitación donde incida la luz del sol directamente y a si el piso lo permite, que sea la de mayor tamaño. Se trata de aprovechar el infecto invernadero que provoca el sol cuando tenemos la ventana cerrada, de forma que se eleva de manera natural la temperatura en el interior de la habitación.
Puede que en alguna ocasión te hayas encontrado con conocidos o familiares que colocan la ropa encima de los radiadores, de las calefacciones centrales o de gas, para que se sequen las prendas rápidamente. Esta opción tiene varios inconvenientes.
Por un lado se pierde poder calórico a la hora de caldear la habitación y necesitas más tiempo para alcanzar la temperatura que tienes marcada en el termostato. Además, al colocar la ropa sobre un radiador, esta lo que hace es endurecerse cuando se seque.
Usa el centrifugado
Foto de RDNE Stock project
Siempre debemos tener en cuenta, que la lavadora haya centrifugado la ropa (si el tipo de prenda lo permite). El objetivo es evitar que ésta suelte agua mientras está tendida. En el caso de que sea imposible centrifugar la ropa o que Haya sido lavado a mano, siempre podemos colocar un plástico sobre el suelo para evitar que las posibles gotas manchen o dañen el piso.
Foto de Olga Lioncat
Si no quieres poner un plástico en el suelo, también puedes colgar la ropa para que escurra en la bañera o en el plato de ducha y cuando ya esté solo humedad, colocarla en el tendedero.
Hay que tener en cuenta, que tanto el agua que puede gotear, como una humedad excesiva, pueden afectar mucho más a suelos de parqué que a superficies de mármol o terrazo. La humedad es el peor enemigo del parqué de una vivienda.
El mantener una habitación con una humedad excesiva, por el motivo que sea, provocar que el parqué se dilate y se hinche al absorber esta humedad, lo que puede terminar haciendo que se levanten las láminas o tablillas que lo conforman o incluso que pueda pudrirse.
También es importante determinar cómo se debe colocar la ropa en el tendedero. Debemos intentar dejar espacio entre las distintas prendas para que el aire circule entre ellas y de esta forma no se generará humedad y se facilitará el que se seque antes.
En el caso de las prendas más delicadas, puedes utilizar perchas para ahorrar espacio y prevenir arrugas. Además, hay ropa que requiere de un cuidado especial y así, las prendas de lana, almohadas, nórdicos... deben secarse en horizontal para evitar que se deformen, es necesario que las seques en horizontal.
Imagen | Vileda en Amazon
Hay que tener en cuenta que la ropa, antes de guardarla, debe estar totalmente seca, puesto que de conservar humedad, puede llevarla a los armarios y roperos. Por eso, y si te corre prisa, siempre puedes hacer que se seque más rápido usando ventiladores que faciliten la circulación del aire o encendiendo la calefacción en casa para elevar la temperatura de forma más rápida, si bien en este caso ya sé que estamos elevando nuestra factura energética.
Con estos sencillos trucos, podemos hacer que la ropa se seque dentro de casa sin tener que recurrir a secadoras o dispositivos que consuman energía y al mismo tiempo, cuidamos tanto el estado de la ropa como evitamos, el que aparezcan humedades en el piso.
Imagen portada | iOnix08
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