Cada vez es más habitual que los pisos tengan menos metros cuadrados, o al menos esa es la tendencia si miramos las nuevas edificaciones y comparamos las casas y pisos que podían comprar nuestros padres o abuelos. Si antes era común un piso de cuatro o cinco habitaciones, ahora el estándar podríamos situarlo en tres estancias y además no muy grandes.
Y a un tamaño más reducido se puede sumar también el hecho de que hay circunstancias en las que en una habitación entra menos luz de la que nos gustaría. Y con todas estas pegas aún podemos usar pequeños trucos visuales que permiten que una habitación pequeña pueda parecer más grande.
Se trata de jugar con la vista y engañar a los ojos para que no se fije en esos detalles que pueden generar la impresión de tener una habitación pequeña. Que lo puede ser, pero vamos a intentar conseguir el efecto contrario.
Apuesta por lo mocromático
Una de las cosas básicas para crear una sensación de amplitud es jugar con los colores. Si quieres evitar una sensación de agobio al montar la habitación apuesta por un o dos colores a lo máximo.
Evita montar en la habitación una paleta de colores y que aquello parezca un estuche de lápices. Se trata de usar el mismo color o el mismo tono en todos los elementos para no provocar un excesivo contraste que nos deje la sensación de un espacio más reducido.
Colores claros
Además, a la hora de emplear colores en paredes y materiales, apuesta siempre por los colores claros. Y es que al mismo tiempo que los colores claros consiguen reflejar más luz que los oscuros y por lo tanto aprovechar la luz que entre en la habitación, también ofrece una sensación de espacio al hacer que las paredes parezcan estar más lejos. Esto se debe a que los colores claros no absorben tanta luz como los oscuros.
Además no hay que olvidar que los colores claros tienden a ser más versátiles en términos de diseño de interiores. Son neutrales y pueden combinar fácilmente con una variedad de estilos y muebles, lo que permite una mayor flexibilidad al decorar la habitación. A todos estos beneficios, el empleo de colores claros puede transmitir una sensación de frescura y limpieza en una habitación y así contribuir a una sensación general de bienestar y comodidad.
Aprovecha la luz natural
Foto de aboodi vesakaran
Este es un factor que no depende tanto de nosotros como los dos anteriores. Se trata de aprovechar la luz natural que entra en la habitación, algo que no siempre sucede. Pero por poca que sea, hay que sacarle partido.
Puedes ayudarte evitando el uso de cortinas gruesas y oscuras, y optando por unas más ligeras a modo de visillos en color blanco o crudo, a juego con el tono monocromático y las paredes claras de forma que acentúen lo que antes hemos comentado.
Elige bien las cortinas
Muy relacionado con estas últimas, si tienes que colocar cortinas en casa lo más aconsejable es usar un estor. El motivo es la sensación de amplitud Y limpieza que aporta, ya que las cortinas de toda la vida, las que venden de rieles generan unas ondas que dan la sensación de ocupar más espacio.
Además, el estor por su forma de estar colocado, queda más pegado a la pared y cuando está recogido no ocupa espacio al estar junto al techo, lo que contribuye a generar una sensación de amplitud.
Usa la luces adecuadas
Si además quieres aprovechar la luz artificial, debes cuidar también como colocas y qué tipo de luces usas en la habitación. Apuesta por una iluminación ambiental o suave, con bombillas que permitan regular la intensidad y colócala en lugares estratégicos como puede ser junto a la cama o en varios puntos de la estancia.
Suelo y muebles
En lo referente al mobiliario lo ideal es emplear muebles con líneas rectas y sin excesivos adornos. Busca mobiliario con línea sencillas que provoquen una sensación de ligereza, sin que tengan molduras u otros ornamentos.
A la hora de escoger los muebles apuesta por la horizontalidad en lugar de por la verticalidad. Se trata de crear una ilusión óptica usando muebles con amplias horizontales, ya que lo que hacen es generar una sensación de un mayor espacio. En este sentido, si los muebles tienen una tonalidad parecida a la pared, crearán una sensación de continuidad y por lo tanto de mayor amplitud. Incluso opta por muebles que no tengan patas, ya que dejan ver el suelo.
Y es que este es otro aspecto importante. Si se ve una amplia zona de la habitación con el suelo al descubierto, existe una mayor percepción de amplitud. Además, si el suelo tiene una tonalidad clara, vamos a lograr el mismo efecto que con las paredes.
Los espejos
Un truco clásico pasa por emplear espejos, pero en lo referente a este tema hay muchas opiniones. No se puede negar que un espejo es un elemento muy práctico para crear sensación de amplitud y al mismo tiempo reflejar la luz y aumentar la impresión de profundidad. Sin embargo no cualquier ubicación vale para colocar un espejo. Debes encontrar la mejor ubicación según la decoración de la habitación y además si te influye el tema de energía, estudia el feg shui de tu dormitorio.
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