La melatonina es una hormona que promueve el estado de sueño. Esta hormona se libera según el ciclo de luz natural al caer la tarde. Pero hay otros factores que pueden alterar los niveles y que podemos controlar nosotros: el uso de la luz adecuada.
Las luces pueden afectar el ritmo de nuestro reloj biológico. Es por ello que, para muchos científicos, ese control que hemos conseguido gracias a la luz eléctrica para iluminar tanto interiores como exteriores puede ser motivo de la epidemia de obesidad actual. Pero ese es otro tema algo más complejo. A nosotros nos interesa contar que no usar una luz adecuada en casa puede afectar a nuestro descanso.
Si habéis leído nuestro especial sobre iluminación LED ya sabréis que podemos optar por luces con diferente temperatura de color. Es importante que en el dormitorio y salón contemos con una luz más cálida. Si no es así el uso de un Dimmer nos puede ayudar a crear un ambiente más relajado. Una luz cálida afecta menos a la producción de melatonina por lo que según avancen las horas nuestro cuerpo nos irá pidiendo descansar.
Igualmente, tal y como comentaban nuestros compañeros de Xataka Ciencia, también es importante dejar de usar el ordenador, televisor, tablet o incluso smartphone un rato antes de ir a dormir. El brillo de la pantalla confunde a nuestro cerebro pensando que no es hora de descansar y puede generar dificultades para conciliar el sueño.
Seguro que muchos ya sabíais esto. Y es que todos hemos experimentado esa sensación de llegar a casa, poner una luz suave en el salón y caer en los brazos de Morpheo. Así como, entrar en un centro comercial, con sus potentes luces blancas, sin ventanas al exterior y perder la noción del tiempo sin saber si es de día, media tarde o de noche.
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