Estamos acostumbrados a que los sensores de presencia estén basados en el movimiento: que se encienda la luz si entro en una habitación y que se apague cuando hayan pasado X minutos sin que el sensor detecte movimientos, lo cual, como hemos comprobado en multitud de ocasiones, tiene sus inconvenientes (una persona que no se mueva lo suficiente como para ser detectada por el sensor será ignorada). El siguiente paso, según Omron Electronic Components, pasa por la detección de personas basándose el calor corporal.
Este tipo de sensores, bautizados como D6T, ofrecen muchas más ventajas con respecto a los sensores de movimiento de las que de entrada pueda parecer. Hablamos de la detección de personas en una habitación por el calor que emiten sus cuerpos, pero los D6T pueden ser usados también para monitorizar la temperatura de una habitación (pongamos el salón, por ejemplo) y ajustarla si es necesario activando el aire acondicionado o el sistema usado para calentar/enfriar que tengamos en nuestro hogar.
Además de ofrecernos todas estas comodidades, cabe destacar el uso que podríamos darle si hablamos de seguridad y prevención de determinados accidentes. Los sensores están preparados para identificar cambios bruscos de temperatura o simplemente detectar puntos en los que se está produciendo un sobrecalentamiento. Incluso al contrario: si un aparato eléctrico emite cierto calor y en algún momento deja de hacerlo puede haberse averiado. Convenientemente configurado, un sistema de este tipo puede llegar a ser muy útil en nuestros hogares a distintos niveles.
Vía | Electronics Weekly Más información | Omron
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